Decia que no publicaba nada porque no tenía nada que publicar, y sin embargo, me he dado cuenta que éste no es ese blog de poemas, poesías y cosas románticas. No es sólo un blog para poner ese tipo de cosas sino para narrar de alguna manera mis "aventuras" diarias.
Y bueno pues a ello que voy...
Esta primera es sobre esa persona a la que admiro sin haber llegado realmente a conocer, esa persona que aunque para algunos parezca ridiculo, he llegado a decirle algo mientras miraba su fotografía. Sobre todo un, espero que nos estés viendo estés donde estés o que sepas que llena de pena no haberte conocido.
13 de Octubre, San Eduardo.
Mi primer día de los dos que trabajo a las 6 de la tarde me viene mi compañera y me dice que me puedo ir para casa. Llamo a Mario y con la misma le digo que por qué no me recoge y nos vamos a tomar algo por ahí.. De pronto me dice que hoy es (era) San Eduardo, y qué mejor que ir a celebrar el santo en un "sitio", bar, restaurante, tasca, taberna, cafeteria, lo que sea Andaluz: El Albero.
Unas cañitas (o en mi caso una coca-cola), unas tapitas y un gran 'Chin-Chin' por uno de los pilares más importantes de la familia a la que agradezco y estoy orgullosa y contenta de pertenecer.
**Un besazo enorme, abuelo.
